El crimen ritual judío

 

Ramón Bau

 

Hemos de hablar sin miedo de temas que pronto nos estarán prohibidos por la dictadura demoliberal.

 

Durante los últimos 10 años no recuerdo haber leído absolutamente nada de este delicado tema, que es absolutamente maldito, y sobre el cual casi nadie desea ni siquiera hablar, incluidas las propias revistas NS. Parte de esa prevención sobre el tema se debe a lo poco que se sabe sobre ello, pero también a que si se habla de ese asunto parece que uno este soñando con fantasmas y cuentos de viejas, con lo que se duda de su salud mental o al menos de su capacidad de ser sensato y equilibrado en otros temas.

 

Pero este artículo es especial, y por ello no creo que debamos dejar de abordar un tema espinoso y muy poco popular sólo por miedo al 'que dirán'. Desde luego no pretendo efectuar un estudio histórico sobre los principales casos de crímenes rituales que se conocen (existen casos claramente documentados), no es esto lo que me interesa difundir, sino el porqué, el espíritu y la esencia del problema es lo que nos debe interesar aclarar.

 

En realidad el problema se basa en los textos de la llamada 'Tradición' judía religiosa: el Talmud. El Talmud es una recopilación de textos rabínicos escritos en diversas épocas, que recogen la 'tradición' de la escuela rabínica judía. De la misma forma que la Iglesia Católica considera la 'Tradición' como parte de la 'Palabra de Dios', y por tanto formando parte del conjunto doctrinal 'sagrado' de la Iglesia (esa 'Tradición viene dada entre los Católicos fundamentalmente por las Actas de Concilios y los documentos de los llamados 'Padres de la Iglesia') de igual forma en el Judaismo la 'Tradición' rabínica se ha concretado en un texto realmente poco conocido que es el Talmud.

 

Una gran parte del 'secreto' sobre los Crímenes Rituales está basado en el Secreto que se tiene en la difusión del Talmud. Durante siglos la difusión del Talmud entre los no judíos era considerado como un crimen por la comunidad judía. Incluso hoy día no se puede 'comprar' el Talmud en las tiendas, es un texto que 'está protegido' por el secreto debido al poder enorme del sionismo.

 

En España publicamos un pequeño texto titulado 'Judaismo al Descubierto' donde se reproducían una parte substancial de las peores y más repulsivas referencias talmúdicas. Existen así mismo diversos textos editados en Argentina que descubren también esos pasajes talmúdicos, etc... son pocos los libros que hablan de ello, pero existen y no son imposibles de encontrar por un especialista. Pero desde luego están fuera del alcance del público en general. Jamás se ha efectuado una película o un libro (tras la post-guerra) que dé a conocer de forma popular los temas Talmúdicos.

 

Realmente si un día la Justicia fuera para 'ser justos' y no para beneficio del Sistema, las actuales leyes que prohíben el 'odio racial' deberían prohibir el Talmud y por tanto la religión judía (mientras no condene de forma clara, pública y notoria al Talmud). La simple aplicación de las leyes 'democráticas' permitirían prohibir al Judaísmo!!.

 

La razón es que el Talmud refleja de forma clara y sin dudas una idea: el goim, el no judío (y en concreto el ario y el cristiano), es un ser despreciable, merecedor de todo el odio y desprecio, pero sobre todo, es un OBJETO asimilable a un ANIMAL. Esta idea central es básica para entender el origen del crimen ritual.

 

El Goim es un animal, es comparado claramente con los bueyes y demás animales de 'ganado'. Pero además hay que entender que dentro de la tradición religiosa judía (cristiana) el 'animal' es un OBJETO sin valor ni consideración. El judaísmo y el cristianismo no asignan al animal el valor de 'parte de la Naturaleza', y por ello parte del Cosmos y de la propia esencia de la Vida, consideración claramente pagana y ecologista que seguimos los nacional-socialistas. Para el judaísmo el 'animal' es un objeto sin valor, al servicio puro del hombre, tal como expone la Biblia en el Génesis: todo está creado por Jehova sólo para servir al hombre. Pero el Hombre es, para el judaísmo talmúdicos, SOLO el Pueblo Elegido, el descendiente de Adán y Eva, según el Pacto de Jehová con su Pueblo, Israel. Por ello los Goims son parte de esa 'creación' de objetos de Jehová al 'servicio' del Pueblo Elegido. Son pues animales de ganado, 'criados' para servicio del 'Hombre', o sea del Pueblo Elegido.

 

Esta es muy sucintamente la base teológica rabínica que se refleja en el Talmud y que de alguna forma ha calado en el espíritu del inconsciente colectivo del Judaísmo durante siglos de enseñanza rabínica cerrada y claustrofóbica.

 

Pero existe además otro tema a entender previamente: la Cábala. O sea la vertiente mágica y esotérica del Judaísmo. Debido a la esquizofrenia mental propia del judaísmo, a su historia de miseria moral y de sectarismo cerrado, ha creado durante siglos una visión esotérica y secretista, repleta de símbolos y ritos generados durante siglos de oscurantismo, en las sinagogas y las tenebrosas reuniones de los guettos... todo ese conjunto de creencias forman la Cábala. Existe una relación clara entre textos 'sagrados' religiosos del judaísmo y la Cábala, cosa que no es de extrañar si alguien ha leído, por ejemplo, textos como el Apocalipsis llamado de San Juan (que refleja el estilo de otros varios Apocalipsis judaicos). Textos místicos, de talante terrorífico, crueles y brutales, donde la BESTIA es el centro del odio y la victoria judía es siempre sangrienta. La Bestia en el Apocalipsis es sin duda Roma, el pueblo pagano, la 'gran prostituta', y a la postre el Goim.

 

De textos así, meditados en conciliábulos secretistas y cerrados por rabinos, dentro del ambiente de odio y degradación del guetto, y bajo el caldo de cultivo del ODIO inmenso que siente la tradición talmúdica judía sobre el cristiano y el goim, se generó la idea del Crimen Ritual.

 

Tenemos ya un primer antecedente moral en el rito judío, absolutamente vigente y actual, de matar los animales del ganado de forma especial, mediante un ritual repulsivo y sangriento, que demuestra ya de por sí una falta de sentimientos y una brutalidad interior indecente. Los judíos mantienen la matanza de los animales para su alimentación según un rito especial que se sigue puntualmente actualmente en los mataderos, efectuando ese rito-matanza rabinos o matarifes-rabínicos.

 

El mero hecho de hacer intervenir 'palabras' y ritos religiosos de forma premeditada en las brutalidades que se cometen con el ganado, desangrándolo, evitando que se les permita 'adormecer' para evitar dolor, en fin eliminando los pocos adelantos anti-dolor que se están intentando introducir en los mataderos, ya demuestra un fondo cruel y sádico. Muchas sociedades pro-animales se han quejado de que se permita la tortura de animales en los mataderos bajo la excusa de 'ritos religiosos', pero evidentemente no sen ha conseguido jamás que se prohíban tan crueles prácticas, una vez más protegidas por el poder sionista.

 

Ese mismo rito llevado al ganado-goím, sería la base del Crimen Ritual. Se trata de ofrecer a Jehova el ganado-goím más deseable, al goím más significado, o mejor a niños, como el sacrificio de terneros o corderitos lechales era el más deseable en las ofrendas de animales. Dado que en repetidos textos talmúdicos el goim no es más que ganado, en tanto es una mera criatura más creada por Jehova para disfrute y uso del Pueblo Elegido, ese rito de sacrificio humano no es realmente 'humano', sino sólo un reflejo de idéntico valor al sacrificio secular de ganado en el Templo de Jehová. Así pues el Crimen Ritual exige dos fases:

 

La elección del goim a sacrificar, que debe ser 'digno' de ser ofrecido, o sea debe ser significado o bien por contra 'inocente', limpio, en el sentido en que se sacrificaba un lechal. Seguir un ritual mínimo. No se trata de un mero asesinato, sino de una ofrenda, por ello debe ser desangrado (dado que el rito judío exige que la sangre, elemento impuro según la Biblia, sea separada de la 'carne' a ser ofrendada). Y exige un rito también en la ofrenda, unas palabras, unas lecturas de ofrenda.

 

Por supuesto una parte del judaísmo religioso se ha separado de la interpretación estricta del Talmud. Como los Protestantes se han separado de la 'Tradición' Conciliar. Pero otra gran parte sigue fielmente la tradición talmúdica. Y no vamos a ocultar que una gran parte de las autoridades rabínicas actuales condenan oficialmente no sólo el Crimen Ritual, sino la interpretación 'animal' del goim, incluso aunque acepten el Talmud.

 

En realidad la realización de Crímenes Rituales exige o ha exigido normalmente la intervención de una componente esotérica, de la Cábala. Han sido siempre elementos ortodoxos judíos, influidos grandemente por las locuras cabalísticas y por un odio desmedido los que han intervenido en esos hechos. Eso no evita que se hayan producido periódicamente hechos que son claramente crímenes rituales, casi siempre disimulados por la prensa, y más o menos ocultos en motivaciones de tipo 'vámpirista' o bajo formas de 'locura' demoníaca. Cuando se ha hablado de un crimen efectuado bajo formas rituales siempre se ha dejado un oscuro velo al tema, incluso cuando se ha encontrado al autor, y se le ha condenado, pero siempre sin aclarar el aspecto ritualista del crimen.

 

No es de extrañar que hayan existido algunos casos entre niños palestinos que pueden ser claramente crímenes rituales, y es muy probable que se hayan producido varios casos más dispersados por todo el mundo en los últimos años. Se han escrito textos clásicos sobre los crímenes rituales, e incluso hace poco pude ver una película como '¿Quien era la Dalia Negra?' que expone bien como podría ser un crimen ritual... realizado en Hollywood, y en donde pese a las evidencias jamás la policía se plantea que pueda ser un crimen ritual judío!.

 

La brutalidad y la crueldad unida a una inteligencia es lo que se necesita. Se precisa una cierta habilidad para poder efectuar el desangrado y el degüelle, el despiece, etc... pero a la vez se precisa una mente diabólica, cruel y sádica....

 

Si embargo creo que el judaísmo como tal ha abandonado la figura del Crimen Ritual en su concepción moderna. O sea, sin duda existirán aun sectas y núcleos judaicos que seguirán las ideas arcaicas del talmudismo y cabalismo, y que aceptarían pues el hecho ritualista. Pero a mi forma de ver se ha producido un cambio significativo en este tema: el Sacrificio personal, individual y sangriento corresponde a una época cerrada y sectaria del Judaísmo, propia de los guettos y su tiempo. El judaísmo actual ha cambiado el significado del sacrificio, pero no la del goím.

 

El Goím sigue siendo un animal, un objeto, y de alguna forma el Pueblo Elegido sigue siendo moralmente dueño del destino, propietario, de los Goíms. Lo que ha cambiado es la forma de sacrificio. El judaísmo moderno está enfocado al dominio del mundo, y en esta fase no tiene sentido el sacrificio individual. Se trata ahora de un sacrificio comunitario: el sacrificio de la juventud y de la comunidad goím que es puesta al servicio del Pueblo Elegido.

 

Los mismos elementos que en otra época y bajo condiciones del guetto hubieran soñado con el crimen ritual ahora trabajan en la degradación colectiva y sistemática de las formas de vida goim, o sea en su sacrificio en el altar de la concepción judía del mundo.

 

El nuevo Crimen Ritual se está realizando en actos concretos y organizados de corrupción global. Sin duda la introducción de droga o la popularización de formas degenerativas, la introducción sistemática de formas de vida sionistas como formas de vida 'oficiales' de la comunidad goim, son la representación actual del rito permanente de odio y menosprecio del Talmud hacia la comunidad aria.

 

 

 

'BORRA LA VIDA DEL CRISTIANO Y MATALE. ES AGRADABLE A LA MAJESTAD DIVINA COMO EL QUE OFRECE UN DON DE INCIENSO'.

 

Sepher Or Israel 177b, Talmud

 

Hemos tomado este ejemplo, entre los muchos que hay, para recordar algo que nadie quiere denunciar. El Talmud, y por tanto la llamada religión judía, es ilegal y criminal y debería ser prohibida en base a las leyes que prohíben el odio racial y religioso. No se hace pues estas leyes están al servicio del sionismo político, no de la Justicia.